19 Mar Por qué pasan y cómo evitar las alergias oculares en primavera
Ya se va acercando la estación de las flores. Pero, lo que para muchos es un bonito fin a las frías noches de invierno, para otros es tos, picores y estornudos. Sí, la primavera también trae alergias, muchas oculares. Si eres sensible a ellas, pronto vas a empezar a notar escozor en los ojos o más lagrimeo que de costumbre. Sin embargo, ¡hay cosas que puedes hacer para prevenirlas! Para que tus ojos no sufran tanto en esta época, te contamos por qué se originan y cómo protegerte de las alergias oculares en primavera.
Qué son y qué causa las alergias oculares en primavera
Cualquier tipo de alergia responde a un agente externo (como el polvo, el polen, el pelo…) que el sistema inmune de una persona reconoce como dañino. Esto causa inflamación, y cuando este proceso sucede en la superficie ocular hablamos de alergia ocular. Y sí, ¡es molesta! Porque te lleva a frotarte demasiado los ojos, a lagrimear y a estornudar.
La primavera, «los ojos altera», y esto se debe a los alérgenos más comunes. El polen, el polvo o el humo suelen ser el origen de estas molestas reacciones en los ojos. Cuando alguno de estos elementos entra en contacto con los globos oculares, se libera histamina. Es una sustancia que te protege del agente externo, pero que inflama los vasos sanguíneos de la superficie ocular, volviéndola rojiza. Además de los alérgenos ya mencionados, el pelo de animal o la intolerancia a alguna sustancia de tu maquillaje también puede causar alergias oculares en primavera.
¿Sabías que hay varios tipos de alergias oculares?
Sentimos decírtelo, pero no. ¡No hay una sola clase de alergia cuando se trata de los ojos! Pueden suceder en diferentes momentos del año y en distintas edades. Por ejemplo:
- La conjuntivitis alérgica: es una hipersensibilidad a los elementos que te producen alergia. Causa ese ardor tan molesto en los ojos. Es menos frecuente que la estacional, pero se puede producir durante todo el año.
- Conjuntivitis alérgica estacional: esta es la que nos interesa, por ser más habitual. Pero también por darse justamente en los meses en que el alérgeno está más presente.
- Queratoconjuntivitis vernal: es una forma estacional y bastante recurrente de alergia en los ojos que se da más comúnmente en niños y adolescentes. Inflama la conjuntiva, la membrana transparente que cubre la parte blanca del ojo y el interior de los párpados.
- Queratoconjuntivitis atópica: esta inflamación del párpado en personas adultas se asocia a menudo a personas con dermatitis atópica. Entre las alergias oculares es una forma rara.
¿Qué síntomas produce la alergia ocular?
Todos sabemos que en primavera estamos más expuestos al polen, principal alérgeno para muchos. Sin embargo, ¿conocías el dato de que en los últimos años el 30 % de la población española sufre de alergias en los ojos? ¡Ha habido un aumento de un 10 % respecto a estudios antiguos! Teniendo esto en cuenta, y como los síntomas de otras patologías pueden parecerse a los de las alergias, te contamos ante cuáles deberías prestar atención:
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- Picor intenso y enrojecimiento: son los síntomas más comunes. El ardor te lleva a querer frotarte los ojos a toda costa. También viene acompañado de escozor.
- Lagrimeo más abundante: con el fin de «lavar» o sacar el alérgeno que ha producido la inflamación, los ojos segregan más lágrimas.
- Hinchazón de los párpados: si cuando sufres de alergias oculares te frotas demasiado o las lágrimas no logran sacar al alérgeno, los párpados pueden hincharse.
- Fotofobia: la sensibilidad a la luz también es un síntoma que pueden experimentar algunas personas cuando se enfrentan a una reacción alérgica en los ojos.
La prevención, tu mejor arma
Te vamos a ser sinceros: las alergias se pueden mitigar con tratamientos y otras estrategias, pero no van a desaparecer por completo. Aquí va la buena noticia: ¡los síntomas se pueden aliviar! Y todo empieza con un adecuado cuidado de tu salud visual, dentro y fuera de casa, además de tomar medidas de prevención. ¡Te dejamos algunos consejos contra las alergias oculares!
Una buena higiene es clave
Limpiar tu espacio es lo mejor que puedes hacer para cuidar de los ojos en primavera. Así te librarás del polvo y moho tan fastidiosos durante esta estación. Además, ten en cuenta que las cortinas o las fundas de los sofás también guardan mucho polvo que podría estar afectando a tu salud visual.
Procura evitar los elementos que te causan alergia
Si eres de esas personas que sufren durante la época primaveral, seguro que no te acercas a las plantas que más polen desprenden. Sin embargo, no estar en contacto con este y otros alérgenos no solo es evitar esas plantas. Para protegerte bien los ojos puedes usar unas buenas gafas de sol. Evita pasar por donde más polen veas y dúchate para eliminar cualquier resto de este alérgeno que pueda quedar en tu cuerpo.
Si sufres una de esas alergias oculares relacionadas con otros alérgenos, no acaricies a mascotas que desprenden pelo y lávate las manos con frecuencia. Así evitarás la propagación de gérmenes, lo que es especialmente importante si usas lentillas. Eso sí, ¡intenta no frotarte los ojos!
El tratamiento, tu as en la manga en caso de que ya hayas desarrollado alergias oculares
Si da la mala suerte de que ya tienes síntomas de alergia, ¡no desesperes! Puedes recibir tratamiento para aliviarlos. Si ya sabes lo que te ha causado la reacción, lávate la cara para eliminar restos del alérgeno y usa lágrimas artificiales. En caso de que lo necesites también puedes recurrir a antihistamínicos, y como último recurso, corticosteroides.
Sin embargo, ten en cuenta que lo mejor es una buena protección para ahorrarte las molestas reacciones de las alergias oculares. A ello te pueden ayudar unas gafas de sol que evitarán el contacto con elementos externos, además de protegerte los ojos de la radiación solar. Y, por supuesto, ¡puedes venir a pedir consejo a Opticoa!
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